La plata vista se ha conservado de forma irregular, con grandes desgastes, por ejemplo, en el esgrafiado de la túnica de San Antonio Abad, donde la plata ha servido de fondo de los ropajes. En las decoraciones de los ángulos superiores de las véneras y hornacinas (San Sebastián) ésta está totalmente negra, alterada o ha desaparecido ya que la plata se enneagrece formando sulfuro de plata al contacto con aire húmedo que contenga hidrógeno sulfurado. El cloro, bromo e yodo actúan ya a la temperatura ordinaria sobre la plata formando los correspondientes compuestos halogenados5.
5 Luis Angel de la Fuente: Los metales plateados como policromía (las corladuras) Análisis-experimentación y restauración. Ed. Universidad del País Vasco, 1999. pág. 746.